Turning Points es una serie de entrevistas en las que invitamos a los propietarios de las tiendas a compartir un momento crucial en la evolución de su negocio.
Cuando Peter Elias fue invitado al espacio para eventos vacío en la parte superior de Cambria Hotel Ocean City y le preguntaron qué tipo de restaurante se imaginaría allí, nació el concepto de Spain Wine Bar. Pero, para hacer realidad este emprendimiento, Elias necesitaría utilizar la red profesional y la visión comercial que había desarrollado durante los años en los que había administrado diferentes restaurantes. Aquí, nos cuenta su historia, que implicó dejar atrás una lucrativa carrera en la industria farmacéutica para abrir uno de los bares de vino y tapas más aclamados de Maryland y lanzar su propia empresa de hospitalidad.
Contexto | Equilibrar el pragmatismo y la pasión
Mi experiencia es algo con lo que muchos estadounidenses de primera generación probablemente se puedan identificar. Mis padres dejaron su casa y sus carreras profesionales en Cairo, Egipto, para mudarse a Detroit, Michigan, con el objetivo de garantizar que sus hijos tuvieran una buena educación y las posibilidades de trabajo que ellos no habían tenido. Al ser el mayor de cuatro hermanos, sentía intensamente el peso de las expectativas de mi familia, y recuerdo que mis padres me decían que podría ser lo que quisiera: abogado, médico o ingeniero.
Pero yo no quería ser ninguna de esas cosas. De niño siempre me asombraba la generosidad e ingenuidad que mostraba mi madre mientras nos preparaba la comida, y admiraba la seriedad con la que se tomaba el arte del servicio: convertía el simple hecho de servir comida en algo sumamente noble. Y desde el primer momento, supe que quería imitar su compromiso con una hospitalidad excepcional.
Desafío | Responder la llamada de la hospitalidad
Como esperaban mis padres, mi educación dio lugar a muchas oportunidades laborales y trabajé en la industria farmacéutica durante 11 años, pero no puedo decir que en algún momento estuve satisfecho. Y, aunque intenté encontrar un significado en mi trabajo como bioquímico y genetista especializado en diabetes y enfermedades cardiovasculares (afecciones que padecía mi padre), me molestaba que los tratamientos médicos que desarrollaba mi empresa, con frecuencia, no eran accesibles para las personas que más los necesitaban.
Quería familiarizarme con el mundo del servicio y la hospitalidad que tanto me recordaba a mi madre, así que comencé a dedicar los viernes y sábados por la noche a trabajar en clubes nocturnos y bares en la ciudad de Nueva York. No les conté a mis padres que estaba trabajando 20 horas más los fines de semana que tenía “libres” ni tampoco les conté a mis nuevos compañeros de trabajo que tenía otro empleo en una importante empresa farmacéutica.
Rápidamente llegué a un punto de inflexión, cuando el propietario de uno de los establecimientos se percató de que yo parecía más dedicado a su negocio que la mayoría de sus empleados. Se tomó el tiempo para sentarse conmigo y me preguntó cuál era mi objetivo. Cuando escuchó mi historia y reconoció las habilidades que podría aportarle a su negocio, me ascendió a gerente general. Tres meses después, invertí en el negocio y me convertí en copropietario. Desde ese momento, presenté iniciativas y sistemas para atraer a la clientela famosa del establecimiento y, a la vez, generar rentabilidad.
Enfoque | Una oportunidad de abrir un restaurante
Durante más de 16 años, mi carrera profesional abarcó diversos establecimientos de la ciudad de Nueva York y, finalmente, me llevó a Washington, D. C., donde me desempeñé como gerente general de Agora y Barcelona Wine Bar. Estaba pensando en comprar uno de los negocios para los que trababa, cuando recibí una fortuita llamada de una amiga de la que no tenía noticias hacía años. Parece que predijo mis aspiraciones emprendedoras en el espacio gastronómico y quería presentarme un posible inversor.
Para mí, esto fue otro punto de inflexión porque, en lugar de comprarle el negocio a otra persona, estaba en una posición para posiblemente comenzar uno propio. Todo esto se hizo realidad cuando el inversor me llevó a Maryland para ver el nuevo Cambria Hotel Ocean City y dar mi perspectiva sobre cómo administraría un restaurante en el último piso. Apenas vi los espacios para comer al aire libre y en el interior del lugar, pude visualizar Spain Wine Bar. ¿Por qué Spain (España)? Había tres motivos:
El establecimiento tenía capacidad para muchas mesas, pero la cocina era muy limitada en lo que respecta a los metros cuadrados. La mejor manera de servir comida de buena calidad a muchos clientes es enfocarse en platos pequeños. Las tapas españolas eran una solución perfecta.
Ocean City es un lugar con un ambiente muy enérgico, especialmente en temporada alta; hay botes y motos de agua en el mar, y cientos de personas en el paseo marítimo. Tiene que ver con un estilo de cocina como tapas: sociable, para compartir y para picar.
Cuando vi las vistas de la costa orientadas hacia el oeste, pensé en el Mediterráneo y lo mucho que les gusta a las personas allí simplemente beber vino y contemplar el atardecer. Creí que sería fantástico llevar esa tradición exclusivamente europea a este lado del Atlántico.
Surgieron otros detalles: cómo haría un trabajo de albañilería personalizado y madera de un siglo de antigüedad para simular una antigua bodega de vinos española e integrar el arte local en el espacio a fin de crear personalidad e inspirar conversación. Sabía que, para convertir a Spain Wine Bar en un éxito, debía confirmar un par de asociaciones clave con algunos chefs y traer maestros culinarios que conocía de trabajos anteriores, cada uno de los cuales estaba bien consolidado y sumamente consumado en su carrera profesional en la ciudad de Nueva York y D. C.
Sorprendentemente, todos los chefs que quería reclutar dijeron que sí y aceptaron mudarse a Ocean City para ayudar a hacer realidad Spain Wine Bar. Y, de alguna manera, conseguí el capital inicial que necesitaba en menos de una semana. Para ser sincero, fue abrumador. No podía creer que todas estas asombrosas personas, con asombrosas carreras profesionales, apoyaran mi idea. Pero solo demuestra lo que es posible cuando generas confianza y seguridad en tus contactos con los años y tienes convicciones sólidas con respecto a tu trabajo.
Resultado | Elogios, premios y creatividad culinaria
Como me sorprendió el apoyo, también me sorprendió el éxito de Spain Wine Bar. En su primer año, lo nombraron Mejor Restaurante Nuevo en la revista Coastal Style. Y ha seguido superando mis expectativas; por ejemplo, en el segundo año, cumplimos objetivos que no esperaba lograr hasta el quinto año. Si observamos los números actuales, estamos un 25 % por encima de lo que estábamos en este momento el año pasado.
Ofertas diversas
Nuestros menús son variados y versátiles, y pueden cambiar no solo de una temporada a la siguiente, sino de una semana a la otra.
Aunque los menús pueden cambiar según la disponibilidad de ingredientes, como obtenemos productos de proveedores, agricultores y pescadores locales, hay determinados favoritos de los fanáticos que siempre están en la oferta, y se convierten en artículos populares para retirar. Nos asociamos exclusivamente con DoorDash para ofrecer el servicio de entrega a domicilio, y ellos facilitan el hecho de agregar y eliminar artículos del menú en línea según lo que se ofrece en ese momento. Hasta ahora, nuestras ventas de DoorDash han aumentado un 14 % en 2024 en comparación con el mismo período en 2023.
Atender a los lugareños en temporada baja
En una ciudad turística como Ocean City, muchos restaurantes cierran las puertas en temporada baja, y sus propietarios se van a destinos como Florida después del Día del Trabajo y no regresan hasta las populares celebraciones a fines del invierno, como el Día de San Valentín o incluso el Día de San Patricio. Nosotros no hacemos eso. Creo que es importante seguir ofreciéndoles excelentes opciones gastronómicas tanto a los lugareños como a los visitantes, así como también es importante darle un trabajo permanente a mi equipo. Y, como resultado, somos rentables.
Adoptar el cambio y el crecimiento continuo
Hoy en día, mi grupo restaurantero Elias World Hospitality LLC me permite traer conceptos gastronómicos nuevos y audaces a Ocean City. Estoy entusiasmado por la apertura de un nuevo restaurante mediterráneo y del Medio Oriente este verano en Ocean Pines, que está a solo 15 minutos de Spain Wine Bar. Y tengo un bistró francés en curso, que estará ubicado a solo una milla, cuya apertura se prevé en el invierno.
A veces, debes perseguir un proyecto en función del buen presentimiento que tienes al respecto y, si tienes el apoyo de buenas personas y tienes fe, funcionará. Me siento muy afortunado de que Spain Wine Bar haya sido uno de eso proyectos, y espero que haya más en el futuro.
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